Coloración Para Adultos

Libros para pintar, ¿terapia para adultos?

De hecho, hay libros para pintar para adultos ya diferencia de los para niños, hay más detalles y están en arabescos, curvas, etc. Estos libros fueron diseñados con la intención de servirlos como arte terapéutico.

Cabe destacar que «arte terapéutico» significa, en un sentido amplio, curar con arte. Entonces, ¿cuáles son las razones para decir que los libros para pintar constituyen ese «arte»?

Mejora de la concentración y la memoria

Cuando éramos niños, cuando íbamos pintando, sólo nos centramos en los dibujos, los colores y la forma en que íbamos a pintar. Esto significa que estimulando la concentración del ser humano, es capaz de concentrarse en una cosa y dejar de lado a las demás.

Los libros para pintar, pues, permiten que los adultos dejen de pensar en su vida cotidiana, su trabajo, sus problemas y se centran sólo en dibujar y pintar, lo que es muy beneficioso para ellos puesto que pueden mejorar la su capacidad de concentración a través de sus libros.

Además de mejorar la concentración, este tipo de libros también ayudan a los adultos a mejorar su memoria.

Un momento de relajación y reducción del nivel de estrés

Como se ha comentado en el párrafo anterior, al pintar, los adultos olvidan su rutina diaria, por lo que se sienten libres desde el momento en que comienzan a pintar. Además, admirar dibujos, en blanco y negro, llenos de fantasías, anima indirectamente a desconectar del mundo real. Estos libros ofrecen entonces a sus usuarios un buen momento de descanso y relajación.

Tampoco debe olvidarse que una persona relajada piensa con más calma y que para él entrar en un estado de paz interior es mucho más fácil. Esto comportará menos nerviosismo y menos ansiedad, mejora de la frecuencia cardíaca y de la respiración, niveles de cortisol más bajos y, por tanto, niveles de estrés más bajos.

En ese caso, podemos decir que los libros para pintar son una forma de meditación activa.

Una unión con las emociones

Para esta parte, nos centraremos más en los mandalas (que significa «círculo» en sánscrito). Estos últimos, procedentes de las tradiciones brahmánica y budista, son dibujos (que utilizan generalmente la forma circular) con dibujos geométricos imbuidos de magia.

Eran utilizados, antiguamente, por los seguidores, para que todo el mundo pudiera expresar lo que está ocurriendo en el momento actual.

Posteriormente, el psiquiatra Carl Gustav Jung se interesó por ese arte y realizó un estudio sobre él. Concluyó que el pintar une al practicante a sus emociones y que el dibujo le permite canalizarlas. Es por este motivo que los libros para pintar que existen actualmente están compuestos por dibujos representados en formas circulares.