Cómo estar bien en tu cuerpo y en tu mente
Es fundamental saber que la felicidad no es un fin sino un estado de ánimo, que sobre todo estemos bien en nuestra cabeza y nuestro cuerpo y vivimos la felicidad.
El día a día, a veces demasiado ocupado, nos puede poner con ciertas barreras que nos alejan un poco más de la “felicidad”, a continuación os dejamos algunas ideas para encontrar una cierta plenitud y orden en su vida.
bien en su cabeza
Saltar
No os enseñaremos nada diciéndoles que estar bien en la cabeza es un cambio real en nuestra forma de pensar. ¿Olvidas tus preocupaciones? Sí, pero ¿cómo? Ignorar los problemas sería más bien huir, lejos de eso. Por el contrario, hay que remediarlos, abordarlos positivamente.
No es fácil abordar un problema de forma positiva, ya que un problema es simplemente un punto negativo. La primera solución es mantener la calma, ver el vaso medio lleno y no medio vacío como dice el dicho. ¡Positivo! Este es un estado de ánimo agradable que sólo le beneficiará!
Pero esto no ocurre al instante; De hecho, es un hábito que se debe tomar y que se hará automáticamente a medida que tengas preocupaciones delante de ti. Y sobre todo, no debemos olvidar: «nunca un fracaso, siempre una lección», porque sí, hay que sacar lo mejor de cada experiencia, incluso de las malas.
También tienes derecho a tener tu jardín secreto, un sitio donde sólo tú conoces perfectamente los rincones, un lugar donde te encontrarás cuando los abrazos de la vida te hagan perder pie.
bueno de cuerpo
¡Una mente sana en un cuerpo sano! Éste es un adagio precioso. El cuerpo y la mente son complementarios y ¿cómo puedes ser bueno en tu cabeza si no eres bueno en tu cuerpo? ¡Te gusta!
Deja de devaluarte, deja de envidiar tal y haz un trabajo real contigo mismo.
Sí, ocurre que tenemos una relación conflictiva con nuestro cuerpo: demasiado grande, demasiado delgado… Olvídate de estos dictados de la sociedad y sé positivo.
mimarte
Cuidar tu cuerpo nunca debe ser una tarea, debe tomarse en el corazón y debe ser una motivación para ti! Es casi imposible llegar a la plenitud si existe una falta de cohesión en la atención.
Un poco de ejercicio
Hacer ejercicio no es sólo para quemar calorías, ¡no! También es una forma mágica de deshacerse de las malas ondas y las malas vibraciones que generan el cuerpo y la mente. Practica un deporte que hayas elegido previamente, un deporte que te refleje.
¿Deporte de equipo para desarrollar y afinar tu espíritu de equipo o más bien deporte individual que afinará tu espíritu y tu vertiente ingeniosa y autónoma?
Come sano, ve a hacer deporte, desfogate, esfuérzate por canalizar el estrés acumulado… Así llegarás a un grado de plenitud y tu vida cambiará.