La verdadera historia de Drácula
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por Gallimard
Historia del príncipe Vlad
Detrás de muchas de las películas de vampiros actuales, Drácula ha inspirado a muchos personajes. En realidad, la historia comenzó con Vlad III, el empalador, príncipe de Valaquia. Nació en Transilvania en 1431, donde se convirtió en príncipe en 1436. Era muy conocido y especialmente despiadado, ya que castigaba a todos los que incumplen su ley, con sentencias que podían llegar a la pena de muerte. Inspiró miedo a su reino, intelectual y físicamente.
Era un hombre bastante cruel que tenía un cuerpo no muy alto, una cara delgada, ojos verdes. Tenía un bigote bastante espantoso y un cabello negro rizado. Lo que también le distinguía eran sus hombros muy anchos, según un emisario del papa Pío II. El príncipe pretendía dispensar justicia derramando sangre. Es sobre todo por ese deseo de venganza y esa sed de sangre que tuvo el apodo de Drácula después de su muerte. También cabe destacar que durante su adolescencia, el príncipe VLAD vivió una situación trágica.
Toda su familia fue asesinada y él fue encarcelado en Turquía. Éste es, sin duda, el motivo que explica su comportamiento cuando se convirtió en príncipe. En lengua valaquia, esta palabra significa el Diablo.
Drácula, la leyenda del príncipe sangriento
Tras la muerte del príncipe VLAD, surgieron muchos rumores que explicaban cómo se convirtió en vampiro. Se decía que después de haber dado batalla, el príncipe siempre bebía la sangre de sus adversarios caídos para aumentar su poder. Y que así pudo asegurar su papel de defensor del reino contra el ejército de los turcos.
Las habilidades y poderes del príncipe de la oscuridad
A menudo, convertirse en vampiro implica ser mordido por un vampiro, tal y como muestran las películas actuales. Como dicen distintas leyendas, el conde Drácula es el primero de todos los vampiros.
Era un ser sanguinario que tenía unos caninos muy afilados, una nariz afilada. También se hace notar que no tiene sombra y que emana un muy mal olor. También tiene el poder de no envejecer. Además, es un ser desprovisto de sentimientos, sin piedad, incapaz de amar o llorar. Tiene la capacidad de hipnotizar a otras personas y transformarse en murciélagos y otras criaturas. Sólo sale a la oscuridad, puesto que se dice que no soporta la luz del sol. Por eso se le llama príncipe de las tinieblas, ya que sólo actúa en las tinieblas.
