Los secretos para hacer que tu matrimonio perdure
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Nos enamoramos, nos casamos (aunque no sea necesario), somos felices. Entonces, la pasión se desvanece despacio.
¿Cómo volver a encender la llama?
En primer lugar, no tiramos nunca la toalla, sólo debemos adaptarnos a medida que pasa el tiempo. Deberemos aprender a escucharnos, a evolucionar serenamente con el otro. ¡Haga llover buenas intenciones, porque el amor es como una planta caprichosa, hay que cuidarla y regarla para que vuelva a germinar!
Manteniendo la complicidad, refresca
Diversifica las conversaciones, hace un tiempo para todo. Encontrar un interés común aparte de las obligaciones habituales. Tiene un momento para hablar de trivia, ver una película juntos, reír con los niños…
¡Es un soplo de aire fresco en casa! Son pequeños momentos como éste los que nos acercan.
Palabras dulces, calientan el corazón
Cuanto más nos reunimos, más se hacen habituales los comentarios inadecuados, no las palabras tiernas. Es una tendencia a revertir. Hacer el esfuerzo de verse el lado bueno y felicitarles bien limpia el aire entre ambos. Además, ¿por qué contaminar su superficie vital cuando piensas quedarte?
Sexo relajante, une
Incluso el nombre «deber matrimonial» asustaría a los más aficionados a los tutoriales. El abrazo debe ser un momento de armonía entre cuerpo y mente, hombre y mujer.
De hecho, el deseo sexual es una expresión de amor especial y preciosa en su pareja. Ayuda a renovar el cariño y la realización de ambos cónyuges.
Con el tiempo, esta vida sexual evoluciona y las formas de mostrar cariño pueden cambiar de forma, pero la preferencia de la exclusividad por el otro se mantiene constante. Este momento es cualquier cosa menos frustrante, así que no tomárselo demasiado en serio es una buena cosa.
¿Qué debe evitarse en pareja?
La rutina, cede
La rutina mata al amor, no es una novedad, pero el problema es que cuanto más la conocemos, más caemos. Por costumbre u olvido, «Bof, no me mueve venir de él» La rutina nos empuja a la indiferencia. ¿La cima? Madame con albornoz, y Monsieur con una camiseta vieja al mediodía (no importa, está entre nosotros)… Y pasa, pasa, hasta que se rompe
El bote de pegamento, despega
Si crees que ser la sombra de tu otra mitad puede consolidar a tu pareja, te equivocas completamente. Por el contrario, se puede asimilar a la asfixia.
Permitirse un pequeño espacio de libertad es vital y enriquecedor para ambos. Llamar a su despacho cada minuto sólo te hará histérico y le hará parecer ridículo a los ojos de sus compañeros. Prueba de confianza.
Bolas de masa pequeñas, degenera
Evite las palabras crudas, los pequeños sarcasmos difíciles de digerir y que corren el riesgo de volver a aparecer varios años después. Casualmente, mini errores como estos argumentos de combustible, se acumulan y terminan envenenando la vida de la pareja. El jarrón acabará desbordando.
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