¿Por qué espuma la cerveza cuando toca la botella?

¿Por qué espuma la cerveza después de golpear la botella?

La explicación simplista

La formación de espuma después de verter cerveza en un vaso es un fenómeno conocido por todos. Este proceso es en todos los aspectos idéntico a la aparición de espuma cuando se toca el cuello de una botella de cerveza abierta. Mucha gente explica este mecanismo por la expansión y explosión de las burbujas contenidas en el líquido.

Este razonamiento es correcto, pero no explica con detalle el mecanismo de formación de espuma en la cerveza. Otras bebidas, como los refrescos, el champán o el Perrier, también contienen burbujas. Sin embargo, no hacen espuma tan bien como la cerveza.

La explicación científica

La espuma que aparece después de un choque en una botella de cerveza encuentra su explicación en un mecanismo bien conocido por los expertos en dinámica de fluidos: la cavitación. El choque provoca ondas de compresión y expansión en la botella. Este fenómeno es comparable a lo que ocurre cuando se comprime un muelle. Este último tiende a estirarse. Sólo, cuando se alarga, supera su longitud en reposo y vuelve a comprimirse.

Es cierto que una botella de cerveza no es tan elástica como un muelle. Sin embargo, un choque bastante sólido en el cuello es suficiente para provocar ondas que se propagan por toda su superficie. A continuación, las ondas van de ida y vuelta varias veces a la altura de la botella. Afectan al comportamiento de las burbujas presentes en la cerveza. Estas burbujas después se fragmentan en varias burbujas más pequeñas, que son más ligeras y más inestables.

Estas «burbujas hijas» suben rápidamente a la superficie tomando la forma de una seta. Y es en ese preciso momento en que se forma la espuma cuando se abre la botella. Cuanto mayor sea la onda de choque, más las burbujas forman espuma.

Un fenómeno observado a gran escala

El fenómeno de la cavitación constituye un problema real cuando se produce a gran escala. Por ejemplo, los fabricantes de hélices de barcos moldean cuidadosamente el perfil de sus productos para minimizar este mecanismo. La formación de burbujas de aire en torno a una hélice acelera la corrosión de sus componentes.

Sin embargo, el accidente del lago Nyos en Camerún sigue siendo la ilustración más notable de este fenómeno. En 1986, un enorme bloque de acantilado se rompió y se sumergió en las aguas de este lago, muy ricas en dióxido de carbono.

La onda de choque provocada por esta caída provocó una explosión y un desbordamiento de monstruo, que afectó a una zona de unos 30 km alrededor del lago del cráter con una superficie de 2,4 km cuadrados y 210 metros de profundidad. No menos de 1000 personas murieron. Piensa en ella la próxima vez que hagas espuma en tu cerveza, que quizás te has encargado de hacer tú mismo o la de un amigo.

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