Qué saber sobre los peligros de la Coca-Cola
Presente en las mesas de las fiestas de cumpleaños infantil, Coca-Cola a menudo se invita a nuestras vidas asociándose a la alegría y el compañerismo. No es en vano que cada día se venden alrededor de dos mil millones de botellas de Coca-Cola en todo el mundo. Su sabor dulce y sus omnipresentes campañas publicitarias han logrado apoderarse del planeta, incluso en los rincones más desfavorecidos. Y sin embargo, varios estudios lo demuestran, los ingredientes que componen el refresco número 1 del mundo son tan peligrosos para la salud, creando, entre otras cosas, adicciones y cánceres. Aquí tenéis lo que necesita saber los riesgos del (sobre)consumo de Coca-Cola.
Adicción a la cafeína
Si nos fijamos en el trabajo dedicado a la Coca-Cola en diferentes momentos, vemos que su contenido en cafeína se ha duplicado desde el año 1970. La cafeína es una sustancia aromática que potencia el gusto y aporta una ligera nota de amargura. Es un suave energizante que, consumido en exceso, puede tener efectos nocivos para la salud, creando adicción sobre todo entre los más jóvenes. Además, es muy recomendable no beber Coca-Cola después de las 5 de la tarde para evitar alterar el ciclo natural del sueño.
Los peligros del ácido fosfórico
El ácido fosfórico (conocido como el aditivo E338) es la marca registrada de Coca-Cola, es lo que da el famoso sabor al refresco. Ingerido con regularidad, el ácido fosfórico sería la causa de varios casos de osteoporosis (enfermedad ósea) y de insuficiencia renal, como demuestran varios estudios estadounidenses realizados durante los últimos diez años. En 2003, por ejemplo, un estudio realizado en 500 personas con insuficiencia renal reveló que el riesgo de contraer la enfermedad se duplicaba o incluso se triplicaba en sujetos que bebían al menos 2 vasos de Coca-Cola al día.
Los riesgos asociados al aspartamo
El aspartamo es el ingrediente utilizado para sustituir el sabor del azúcar en las bebidas «light» y «cero». Hay muchas controversias sobre el aspartamo. ¿Sabías que se suspendió en los años 70, poco después de su comercialización, porque los animales de laboratorio habían desarrollado convulsiones epilépticas y tumores cancerosos después de ingerirlo? Desde entonces, se ha vuelto a poner en el mercado legalmente, gracias en particular al apoyo de los grupos de presión. Además de su potencial cancerígeno, un estudio realizado en 60.000 mujeres embarazadas y publicado en el famoso «American Journal of Clinical Nutrition» muestra que el riesgo de parto prematuro aumenta potencialmente por el consumo habitual de aspartamo.
El reto de un americano de beber 10 latas de Coca-Cola al día
Para demostrar los peligros del consumo excesivo de Coca-Cola, un americano sano de 50 años decidió beber diez latas de Coca-Cola al día durante 3 meses. Como consecuencia, pasó de 73 kilos a 87 kilos con una barriga destacada. Además, su presión arterial pasó de 129/77 a 145/96 y se quejó de dificultades a la hora de ingerir alimentos puesto que tenía el estómago lleno de Coca-Cola y su sangre saturada de azúcares. También dijo que experimentó intensos deseos adictivos.