Ruido nocturno y otras perturbaciones vecinales: ¿qué hacer?
Contents
¿Cómo reaccionar frente a los disturbios del barrio?
Vivir en sociedad tiene muchos inconvenientes. Podemos hablar de perturbaciones vecinales cuando la actuación de otros inquilinos afectan a diario a la tranquilidad del barrio.
En cualquier caso, todos los ruidos o revuelos ofensivos, ya sean de día o de noche, que puedan perjudicar la tranquilidad de sus vecinos son susceptibles de sanciones, independientemente de si se viva en la ciudad o en el campo.
Trastornos del barrio: ¿qué son?
Los disturbios vecinales pueden dar lugar a muchas disputas, la mayoría de las cuales hoy terminan en los juzgados. Son molestias, sonoras u olfativas, o trastornos provocados por un vecino y que pueden perjudicar a las personas que viven cerca de éste último.
Sin embargo, es importante distinguir entre las perturbaciones normales del barrio y las alteraciones anormales. Los primeros no son necesariamente reprobables mientras que en el segundo caso, como víctima, puedes reclamar una indemnización a tu vecino.
Problemas de barrio: posibles remedio
Si eres víctima de molestias causadas por uno de sus vecinos, primero debe intentar resolver el problema de manera amistosa. Algunas personas no siempre se dan cuenta de las molestias que causan, a las que pueden terminar de inmediato. Si su vecino no es complaciente, envíe una carta para recordarle su visita y la situación.
¿Aún no hay ningún progreso? Envíe esta vez una carta certificada con acuse de recibo. La intervención de un conciliador de justicia permite a menudo encontrar una solución amistosa. Si este recurso todavía falla, puede acudir al tribunal. Sin embargo, a menudo éste es un procedimiento costoso y que requiere tiempo.
¿Cómo luchar contra el ruido nocturno?
Nos referimos al ruido nocturno cuando la molestia se produce entre las 22h y las 7h. El ruido nocturno no se trata sólo de ruidos repetitivos. Para solucionar este problema, primero es necesario iniciar un proceso de conciliación. Trate de explicar a tu vecino las molestias que causa su contaminación acústica.
Si después de esto, no modifica su comportamiento, deberá enviarle una carta sencilla, seguida de una carta certificada A/R si todavía no se muestra conciliador. Puedes implicar al síndico de copropiedad de tu edificio para intentar encontrar una solución favorable a tu problema. También puede intervenir un conciliador de justicia para intentar resolver el conflicto.
Puedes ponerte en contacto con la policía para saber qué contaminación acústica está experimentando, si realmente está demostrado. De lo contrario, corre el riesgo de ser condenado por denuncia calumniosa. Como último recurso, tiene la opción de llevar el caso a los tribunales para ganar su caso.
.