Saber gestionar los conflictos

Aunque es un ser social, el ser humano está hecho de modo que entra fácilmente en conflicto con los demás siempre que la otra persona no comparta sus opiniones. En ocasiones podemos ser un actor, en ocasiones un observador de sus situaciones de conflicto que pueden aumentar si no intervenimos a tiempo. Te damos algunos consejos para calmar suavemente el conflicto.

Reconocer un conflicto

El conflicto generalmente procede de una diferencia de opinión sobre un tema. Cuando la gente no puede ponerse de acuerdo, hay dos tipos de comportamiento: o las personas huyen y evitan comunicarse entre ellas, o bien una persigue a la otra en un trasfondo de acoso moral para capitular a la otra . En ambos casos la situación entre los protagonistas es tensa y puede afectar al resto de su entorno.

Resolver el conflicto escuchando

Lógicamente, durante un conflicto, la gente no quiere escuchar los argumentos de la parte contraria, a menudo juzgándolos como inútiles. Sin embargo, escuchar la versión de la persona en desacuerdo puede permitir tener una visión complementaria para encontrar una solución al problema encontrado.

Si entras en conflicto, no te cierres y estés abierto a la conversación. Elija un momento adecuado para ello en un terreno neutral. De hecho, tanto si se trata de un conflicto profesional como doméstico, el encuentro fuera del lugar común permite echar una mirada nueva a la situación, que tiende a minimizarla.

Proponer un acuerdo win-win para resolver un conflicto

El intercambio te permitirá entender las expectativas del otro y tenerlas en cuenta. Así se puede proponer un acuerdo amistoso del que las dos partes salgan como ganadoras. El no reconocer la opinión contraria cierra sistemáticamente cualquier avance a favor de un resultado positivo y constructivo.

Obtenga ayuda de un mediador en caso de un conflicto terco

Si, a pesar de los esfuerzos de ambas partes, no puede llegarse a un acuerdo, se recomienda pedir ayuda a un tercero. Para ello, puede consultar a una persona neutral de su entorno común que tuviera un papel de observador en el conflicto. Ella podrá expresar su versión de los hechos visto desde afuera sin tomar partido tampoco.

Si no dispone de este tipo de intermediarios, no dude en consultar a un terapeuta profesional que le escuche y que conozca las técnicas de la psicología para dar una solución a la crisis que está pasando.

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *